LA FALTA DE CONCIENCIA HUMANA TARDE O TEMPRANO PASARA FACTURA
El día de ayer alguien mato vilmente una serpiente, su primera reacción apenas la vio fue tomar un machete entre sus manos y salir corriendo a acabar con ella, cuanta ignorancia encierra el ser humano, desconocemos mucho de la madre naturaleza, vivimos inmersos en el miedo y eso nos hace tener reacciones abruptas e inesperadas, el gran porcentaje de estos reptiles son inofensivos y por el contrario cumplen una función de equilibrio, pero ¿porque reaccionamos de esta manera?
De niños nos enseñaron que son peligrosas, en el campo pasaban muchos accidentes, algunos de ellos causados por picaduras de serpientes y en algunos casos se volvían fatales si no se trataban a tiempo, fue así como se convirtieron en blanco obligado para poder seguir las labores cotidianas de la tierra, a día de hoy quedan pocas de ellas, su persecución desmedida las ha llevado a un riesgo de exterminio, es cierto que algunas son venenosas pero la gran mayoría cumplen la función de equilibrar el ecosistema para que este sea sostenible, además las que son venenosas no atacan si no se sienten amenazadas.
El abuso de la madre tierra en la mayoría de los casos se da por la ignorancia, por el adormecimiento del ser humano y por su afán de conquistar nuevas maneras de explotación, hoy esta pandemia nos ha enseñado que los verdaderos inconscientes somos nosotros, muchas filosofías espirituales nos dicen que somos uno con la naturaleza y todas sus formas, la física cuántica que a día de hoy es lo más elevado en investigación científica nos demuestra con datos concretos que cada partícula subatómica de la que estamos compuestos, está presente en todas las formas, incluso puede demostrar matemáticamente que somos capaces de intercambiar átomos entres si, sin importar si es vegetal, animal o humano, esto debería ser suficiente para no atentar contra ninguna especie.
Mientras nuestra mente no sea capaz de vibrar en otras frecuencias, que equilibren el planeta seguiremos siendo los arquitectos de nuestra propia destrucción y eso justamente fue lo que colapsó otras civilizaciones, si nos remontamos dos mil cincuenta años (2050) atrás nos encontramos con la caída de uno de los imperios más grandes de la era de la una humanidad, el gran imperio Egipcio, las causas aún son desconocidas, muchos coinciden que fue la presión del imperio Romano, otros dicen que hubo un cambio climático causado por el abuso de las tierras, el cual atrajo hambruna y miseria entre sus habitantes, no se sabrá con certeza cuál fue su desaparición al igual que otros imperios que conocemos en los libros de historia, lo único cierto es que todo tiene su final, a día de hoy nuestra civilización humana enfrenta grandes retos y podemos empezar de cero, pero llegará una época donde todos los abusos de poder y el desmesurado actuar con el entorno tarde o temprano pasa factura.
Es momento de hacer una introspección, de mirar hacia adentro y detenernos a pensar cuánto daño hemos generado, es hora de limpiar, de renovar y de hacer las cosas de manera diferente, es momento de doblegarnos ante la magia que existe en la naturaleza, en cada ser viviente, que hoy reclama su espacio o por lo menos su respeto.